El acolchado, también conocido como mulching, es una técnica fundamental en la horticultura ecológica que consiste en cubrir la superficie del suelo con una capa de material orgánico o inorgánico.

En verano y durante los meses de más calor, el acolchado actuará acumulando la humedad de la noche y los riegos. De esta forma, te ayudará a mantener el suelo nutrido durante más tiempo.

Esta práctica aporta una serie de beneficios cruciales para el huerto:

Beneficios del acolchado:

  1. Retención de humedad:
    • El acolchado reduce la evaporación del agua del suelo, manteniendo la humedad por más tiempo. Esto es especialmente importante en climas cálidos y secos, o durante los meses de verano.
    • Disminuye la necesidad de riego frecuente, ahorrando agua y tiempo.
  2. Control de malezas:
    • La capa de acolchado actúa como una barrera física que impide el crecimiento de malezas, reduciendo la competencia por agua y nutrientes.
    • Minimiza la necesidad de utilizar herbicidas, lo que beneficia la salud del suelo y de las plantas.
  3. Regulación de la temperatura del suelo:
    • El acolchado ayuda a mantener una temperatura más estable en el suelo, protegiendo las raíces de las fluctuaciones extremas de temperatura.
    • En verano, el acolchado reduce el calentamiento excesivo del suelo, y en invierno, protege las raíces del frío.
  4. Mejora de la estructura del suelo:
    • El acolchado orgánico se descompone gradualmente, aportando materia orgánica al suelo y mejorando su estructura.
    • Aumenta la capacidad de retención de agua y nutrientes del suelo, y favorece la actividad de los microorganismos beneficiosos.
  5. Protección contra la erosión:
    • El acolchado protege el suelo de la erosión causada por el viento y la lluvia, evitando la pérdida de nutrientes y la degradación del suelo.
    • Mantiene la tierra en su lugar, evitando que las raíces queden expuestas.
  6. Protección de frutos y hortalizas:
    • Evita que los frutos y hortalizas que crecen cerca del suelo entren en contacto directo con la tierra, previniendo la pudrición y las enfermedades.
    • Mantiene los frutos limpios y libres de tierra.
  7. Aporte de nutrientes:
    • Al descomponerse el material orgánico, aporta nutrientes al suelo, que son absorbidos por las plantas.

Tipos de acolchado:

  • Acolchado orgánico:
    • Paja, heno, hojas secas, restos de poda, compost, astillas de madera.
    • Se descomponen gradualmente, aportando materia orgánica al suelo.
  • Acolchado inorgánico:
    • Plástico negro, mallas anti hierbas, grava, piedras.
    • No se descomponen, pero ofrecen una protección duradera contra las malezas y la erosión.

Consideraciones importantes a tener en cuenta:

  • El espesor del acolchado debe ser de unos 5-10 cm para ser efectivo.
  • Es importante utilizar materiales limpios y libres de enfermedades.
  • En climas húmedos, es importante asegurar una buena ventilación para evitar la proliferación de hongos.

En resumen, el acolchado es una práctica esencial para mantener un huerto sano y productivo, optimizando el uso de los recursos y protegiendo el suelo y las plantas.

¿vosotros realizáis esta técnica en vuestros huertos?  ¡contádnoslo en comentarios!